Decenas de estudios científicos advierten que la contaminación electromagnética puede provocar graves efectos en la salud, alteraciones en el sistema nervioso central, leucemia y ciertos tipos de cáncer.
En nuestro país sólo existen normas técnicas y de seguridad para la instalación de antenas. Movimientos ciudadanos se han opuesto a su instalación y proliferación en barrios residenciales, presentando recursos judiciales que, la mayoría de las veces, no son acogidos. Cualquier normativa a implementar debiera permitir la participación ciudadana, asegurar el acceso a la información, proteger la salud de la población y el medioambiente e incorporar el "principio de precaución".
"El desarrollo del cáncer por exposición a radiaciones electromagnéticas es un efecto diferido, es decir, se desarrolla después de un período de latencia que puede durar muchos años. En el caso de los celulares y de las centrales de retransmisión, la información es insuficiente por su limitado tiempo de uso. Aún así, debiera aplicarse el principio precautorio", dice Andrei Tchernitchin, académico del Laboratorio de Endocrinología Experimental y Patología Ambiental del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.
El principio precautorio fue reconocido en el Protocolo sobre Seguridad de la Biotecnología, del Convenio sobre la Diversidad, y ha sido incorporado en la legislación de países como Suiza, Australia, Alemania, Canadá, Francia, Holanda, Nueva Zelanda, Suecia, Brasil, Colombia y Ecuador, entre otros. Aún Chile no lo consagra en su legislación medioambiental, a pesar de la ratificación por parte de nuestro país de tratados internacionales como la Convención de Viena para la Protección de la Capa de Ozono, el Protocolo de Montreal, la Convención de la Biodiversidad y la Convención de Cambio Climático.
La contaminación electromagnética podría provocar esclerosis lateral amiotrófica, Alzheimer, dermatitis, enfermedades alérgicas, asma bronquial, aumento de incidencias de abortos, alteraciones neuroconductuales, cardíacas y endocrinas, entre otras. Al investigar las muertes causadas por arritmia e infarto agudo del miocardio se ha establecido que "hay relación con la exposición acumulativa a este tipo de contaminación". La exposición a campos electromagnéticos debiera regularse a través de "normas de emisión". Preocupa que en Chile exista una instalación indiscriminada de antenas que ni siquiera cumplen la feble normativa existente. El único trámite es que la Subtel autoriza y avisa de las obras a las municipalidades. Sólo se revisan aspectos técnicos y la ubicación de las antenas se rige por la Ordenanza General de Urbanismo. Se presentan los planos a la Dirección de Obras que sólo puede objetar el lugar o alguna norma técnica incumplida. La Subtel (según resolución del año 2.000) fija una norma técnica sobre "requisitos de seguridad" y un "límite de emisión": 435 uW cm2 de densidad de potencia.
"La radiación electromagnética aumenta la proliferación celular, en especial en algunas líneas celulares tumorales, lo que puede contribuir a incrementar el desarrollo de tumores. También puede originar efectos indirectos, como alterar el funcionamiento de marcapasos, alterar la permeabilidad celular, aumentar la proliferación celular como en el cáncer de próstata, etcétera", señala el doctor Andrei Tchernitchin. Según Tchernitchin, el año 2003, los científicos Borbély y Huber advirtieron que "la exposición a la señal de telefonía móvil podría causar ligeros cambios en los patrones de sueño", mientras los académicos Kramarenko y Tan, hablaban de "cambios en la función cerebral eran atribuidos al uso de celulares". Se ha relacionado el uso de celulares al incremento de tumores, cáncer de piel y tumores cerebrales, Parkinson y al riesgo de acelerar la aparición de Alzheimer. Un estudio en California concluyó que la leucemia en niños, cáncer cerebral en adultos, problemas cardiacos y suicidios, tenían como factor de causa-efecto las radiaciones electromagnéticas.
Autor: Arnaldo Pérez Guerra
Punto Final / La Insignia. Chile
La verdad que asusta un poco el ver como algo que se ha convertido en tan imprenscindible sea tan dañino para la salud. ¿Por que las autoridades sanitarias no advierten de este tema? al igual que advierten que fumar es malo.
ResponderEliminarEn EEUU se empieza advertir que el WIFI es perjudicial para la salud por las ondas que emiten, aconsejando que hagan un uso moderado. Aquí en España se están empezado habilitar lugares públicos con el WIFI si está muy bien si lo miras que gratis puedes acceder a Internet, ¿pero alguien ha comunicado a los ciudadanos del peligro que eso supone? Y el derecho de quienes no lo quieran ¿por qué tienen que pasar por esas ondas? ya que son lugares públicos y abiertos, como estaciones de autobus, aeropuertos etc...
Un saludo